miércoles, 3 de octubre de 2007

Lamentable partido del Barça en Alemania

El mejor fue una vez más el porterazo que sigue sumando intervenciones de gran mérito en momentos determinantes. Con eso está todo dicho. El centro del campo fue un correcalles espantoso y por suerte los alemanes son mucho menos de lo que imaginaba, quizás están pagando la inexperiencia en la Champions. Contra un rival potente hubiese sido muy difícil puntuar. Andrés Iniesta hizo un partido más que correcto en una posición que evidentemente no es lo suya (salta a la vista que no tiene físico para jugar por delante de la defensa), demostrando una vez más el grandísimo jugador que es. El problema viene cuando se hace el equipo por eliminación o por simple encaje en lugar de hacer un planteamiento táctico serio. La alineación de los tres pequeños más la poca consistencia defensiva del trío de delanteros era arriesgada. Si le sumas a Thuram se convierte en un suicidio.

Las lesiones de Touré y Márquez son lo peor que nos podría haber pasado. Estaban siendo dos de las grandes claves para entender la solidez del nuevo Barcelona (el otro factor determinante es evidentemente la vuelta del número uno, la auténtica materia gris del Barça: Deco). La salida de balón que ofrece Márquez es fundamental, así como su impresionante poder de anticipación y su capacidad innata para trazar la línea del fuera de juego a la perfección. Por otro lado la aparición de Touré en el centro del campo da mucho equilibrio y oxigena a los interiores; su fortelaza física y su juego fácil son una garantía. Estos jugadores han sido clave para conseguir la solvencia defensiva de la que ha hecho gala el equipo de Rijkaard hasta conseguir que Sevilla, Zaragoza o Lyon no llegaran a Valdés. De cara a los próximos compromisos no se me ocurre ningún once que no incluya un centro del campo con los tres pequeños y eso me preocupa, como me preocupa que tenga que seguir siendo titular ese señor llamado Thuram que aún cree estar jugando junto a Cannavaro y Buffon ....

En cualquier caso el futuro a largo plazo es esperanzador ya que se empieza a vislumbrar un once tipo consistente. Habrá que sobrevivir al corto plazo como buenamente podamos.

1 comentario:

Albertini dijo...

Ya que no tuve tiempo para escribir sobre el partido de Glasgow, aprovecho esta entrada para decir que el Barcelona me gustó mucho más que en Stuttgart. Fuimos más conservadores pero por lo menos no pasamos apuros innecesarios. Gudjohnsen y Milito sensacionales.